Un merecido y necesario descanso

Finalmente he decidido tomarme un pequeño descanso, salir un poco de la rutina y por primera vez en no se cuantos años, alejarme unos días de la computadora (quizás esto resulte lo más difícil). Tampoco será mucho tiempo, estaré fuera apenas una semana, pero estoy seguro que mis ojos, mi cabeza, y quizás hasta las personas con las que convivo diariamente, me lo van agradecer.

Si soy sincero la idea de dejar todas las comodidades de la ciudad e irme a un campo pesquero donde no hay agua, energía electrica (bueno, tenemos placas solares) o internet, no me entusiasmaba demasiado, más si consideramos que son cerca de 14 horas de viaje (si no es que más). Sin embargo creo que esto es justamente lo que me esta haciendo falta en este momento,  dejar de lado este sedentarismo y recordar un poco lo que era mi vida antes de mudarme a la ciudad (que afin de cuentas soy de pueblo). Además últimamente he andado demasiado distraído, incluso un poco estresado, y creo que no me haría mal tomarme un pequeño respiro para pensar, analisar e intentar corregir muchas de las cosas que vengo haciendo mal.

Tampoco estaré completamente de ocioso, me llevo una cámara y voy a tener la oportunidad de disfrutar de la naturaleza (un tanto hostil eso si, pero naturaleza al fin), playas vírgenes, el mar y muchas, muchas horas para pensar.  Espero sacarle mucho provecho a este pequeño descanso y regresar con el animo renovado, quién sabe, igual y hasta se me hace hábito. Ya les estaré contando que tal me fue, no leemos pronto.