Un comienzo.

Y llego el momento, tras días de irme a dormir pensando una y otra vez en los mismo, de planear, de posponer, un ligero empujón y finalmente estaba ahí, puntual a la cita sin saber que esperar, sin la menor idea de por donde comenzar.

No se de cuantas maneras distintas imaginé este momento, ciertamente no así, sólo, a pesar del mundo de gente, pero creo que era justo, ahora no se me ocurre una mejor manera de encarar mis miedos o mis vicios siendo que uno de ellos es precisamente ese, la soledad.

Por momentos me sentí distinto, por momentos yo era ese que se atreve, me sentí más como la persona que quiero ser que como la que soy ahora, quizás porque decidí aparentarlo, quizás porque empiezo a serlo, quizás porque no existe diferencia. Aunque sentí cierto nerviosismo también me sentí agradecido, más allá de los resultados no siempre se tiene la oportunidad de experimentar algo nuevo, algo que siempre quisiste hacer y nunca te tomaste el tiempo. Sería cómodo para mi decir "siempre quise" a manera de anécdota pero eso nunca me dejaría conforme, prefiero mil veces el "intenté" e incluso ir más allá, porque de la casualidad de que nunca es tarde y nunca se es demasiado viejo.

Los detalles son lo de menos y lo son todo, pero lo que importa es que me di cuenta de que esto será mucho más difícil de lo que pensé y pese a ello nunca me sentí más motivado.

¿Qué logré con esta pequeña e insignificante conquista? nada, mucho, un comienzo.