Descanso, sketchbook y nuevo proyecto.
A pesar de que dicen que soy un convenenciero por haber aprovechado los días de descanso con motivo de la semana siendo que hace años que me desentendí totalmente de la iglesia, no siento culpa alguna. Y pues si, me dí una escapada relámpago en compañía de mi hermano a visitar a mis papás y mi hermana.
Fue un viajecito de algo así como 1800 km la vuelta completa por carretera. Sin contar los dos días viajando, que también se disfrutan a su manera, fueron tres días de no hacer otra cosa más que comer (comer mucho y muy rico), pasear, dormir y olvidarme por completo de todas las posibles preocupaciones que podrían existir en mi vida, claro en compañía de mi familia.
Parecen pocos pero cuando se disfrutan tanto, tres días llegan a ser suficientes para volver renovado. Además en un lugar que es un verdadero santuario natural (ya le he dedicado un par de entradas en este mismo blog), al grado que supone un dilema para mi hablar de él. Por una parte quisiera que más gente tuviera la oportunidad de conocerlo, de visitarlo, que disfrutaran todo lo que hay ahí, y por otro lado me preocupa el impacto que esa posible popularidad podría tener en él con el tiempo.
En fin, ya habrá tiempo de mostrarles algo de lo que vi por allá cuando termine de editar un video que grabé, y para que no se queden con la idea de que soy egoísta con mi refugio, les comento que ya hasta ando haciendo planes para llevarme a unos cuantos amigos conmigo la próxima vez que lo visite.
También me llevé mi sketchbook en este viaje, pero prácticamente fue solamente a pasearse porque a decir verdad estuve tan ocupado no haciendo nada que no tuve tiempo para dedicarle... salvo por un desafortunado momento en que intenté dibujar un pelícano no muy dispuesto a cooperar, pero no hablemos de eso.
Ya de regreso si me puse a dibujar y de una práctica nocturna surgió este retrato con acrílicos. Lo hice en mi cuaderno de bocetos y no está terminado pero de momento pienso dejarlo así, creo que parte del valor didáctico de este tipo de trabajos va a ser no dedicarle más de una sola sesión, al menos esas es mi intención por ahora.
Y como no queriendo la cosa ese cuaderno va adquiriendo cierto peso, lo que me hace pensar que este si lo terminaré. Además cuenta ya con garabatos de una par de bellas y talentosas artistas (o talentosas y bellas si prefieren ese orden), lo que sin duda deberá de contribuir a incrementar su valor ¿cierto?. Eso espero.
Y en cuanto a proyectos, pues como finalmente terminé el cuadro con el que estuve trabajando prácticamente desde que inició el año (ya montado en bastidor, firmado y todo), estoy iniciando con un par más previendo tener de donde echar mano cuando se llegue la próxima exposición.
A sabiendas de que los temas que me gustan toman algo de tiempo desarrollarlos, en el intervalo estoy trabajando un bodegón (naturaleza muerta), es bastante chico en contraste con lo que venía trabajando así que yo esperaría no me tome mucho terminarlo. Fue bien divertido preparar la referencia, económicamente hablando no tanto, pero con vino, cerveza, queso, pan, uvas y algunas frutas, cenamos y bebimos bien ese día, no puede haber queja de mi parte.
Y eso es básicamente un buen resumen de lo que he andado haciendo estos días, no todo desde luego, la verdad es que han sido días muy movidos y un tanto extraños, pero muy agradables. Ya veré que más les platico la próxima ocasión, de momento, a seguir pintando que también estoy empezando un retrato.
Fue un viajecito de algo así como 1800 km la vuelta completa por carretera. Sin contar los dos días viajando, que también se disfrutan a su manera, fueron tres días de no hacer otra cosa más que comer (comer mucho y muy rico), pasear, dormir y olvidarme por completo de todas las posibles preocupaciones que podrían existir en mi vida, claro en compañía de mi familia.
Parecen pocos pero cuando se disfrutan tanto, tres días llegan a ser suficientes para volver renovado. Además en un lugar que es un verdadero santuario natural (ya le he dedicado un par de entradas en este mismo blog), al grado que supone un dilema para mi hablar de él. Por una parte quisiera que más gente tuviera la oportunidad de conocerlo, de visitarlo, que disfrutaran todo lo que hay ahí, y por otro lado me preocupa el impacto que esa posible popularidad podría tener en él con el tiempo.
En fin, ya habrá tiempo de mostrarles algo de lo que vi por allá cuando termine de editar un video que grabé, y para que no se queden con la idea de que soy egoísta con mi refugio, les comento que ya hasta ando haciendo planes para llevarme a unos cuantos amigos conmigo la próxima vez que lo visite.
También me llevé mi sketchbook en este viaje, pero prácticamente fue solamente a pasearse porque a decir verdad estuve tan ocupado no haciendo nada que no tuve tiempo para dedicarle... salvo por un desafortunado momento en que intenté dibujar un pelícano no muy dispuesto a cooperar, pero no hablemos de eso.
Ya de regreso si me puse a dibujar y de una práctica nocturna surgió este retrato con acrílicos. Lo hice en mi cuaderno de bocetos y no está terminado pero de momento pienso dejarlo así, creo que parte del valor didáctico de este tipo de trabajos va a ser no dedicarle más de una sola sesión, al menos esas es mi intención por ahora.
Y en cuanto a proyectos, pues como finalmente terminé el cuadro con el que estuve trabajando prácticamente desde que inició el año (ya montado en bastidor, firmado y todo), estoy iniciando con un par más previendo tener de donde echar mano cuando se llegue la próxima exposición.
A sabiendas de que los temas que me gustan toman algo de tiempo desarrollarlos, en el intervalo estoy trabajando un bodegón (naturaleza muerta), es bastante chico en contraste con lo que venía trabajando así que yo esperaría no me tome mucho terminarlo. Fue bien divertido preparar la referencia, económicamente hablando no tanto, pero con vino, cerveza, queso, pan, uvas y algunas frutas, cenamos y bebimos bien ese día, no puede haber queja de mi parte.
Y eso es básicamente un buen resumen de lo que he andado haciendo estos días, no todo desde luego, la verdad es que han sido días muy movidos y un tanto extraños, pero muy agradables. Ya veré que más les platico la próxima ocasión, de momento, a seguir pintando que también estoy empezando un retrato.
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